El Colegio Saint Andrew fue fundado en agosto de 2005 y acogió a sus primeros alumnos el 2 de marzo de 2006, comenzando así nuestra historia con 107 alumnos distribuidos entre Playgroup y 7º Básico. La primera de las diez generaciones de exalumnos a la fecha, egresó hacia la universidad el año 2011.
El proyecto educativo del colegio está fundado en los principios de los valores cristianos y aspira al desarrollo de hombres y mujeres que sean un aporte para una sociedad solidaria y justa, en la cual podamos actuar bajo el prisma del cristianismo como principal filosofía de vida, relacionándonos con nuestros hermanos a través de una convivencia basada en el amor, la responsabilidad, el respeto y la verdad.
Conscientes de la necesidad de que los alumnos sean capaces de relacionarse con distintas culturas y personas, el colegio da especial importancia a la enseñanza y dominio de la lengua inglesa. Asimismo, para todos los alumnos entre los cursos de tercero a octavo básico, cuenta con un programa de educación de la lengua y cultura China.
Desde el 2019, se comenzó el trabajo en un programa habilidades de programación desde los cursos más pequeños que busca entregar a nuestros estudiantes, las habilidades en esta área desde la flexibilidad cognitiva y la interacción entre áreas del aprendizaje.
El Saint Andrew es un colegio familiar y, por ello, da una importancia especial a la integración, a la tolerancia y al respeto por las individualidades de las personas.
Actualmente cuenta con un programa de inclusión dirigido a los hermanos e hijos de familias del colegio que, independientes de sus dificultades, comparten normalmente con el resto de la comunidad escolar, y para quienes se desarrollan programas complementarios de aprendizaje que les permiten obtener las herramientas necesarias y así continuar con su desarrollo personal y académico en un entorno educativo natural.
En el Colegio se fomenta la solidaridad, tanto a nivel familiar como social, la responsabilidad moral, la honestidad y el respeto entre los alumnos, docentes y funcionarios.
La formación valórica cristiana dentro de la comunidad escolar es primordial. La educación que se imparte busca crear una atmósfera donde el alumno participe activamente en el desarrollo de sus propias capacidades, en un ambiente de sana convivencia, alentando la constante reflexión personal y la sencillez. En esta misma línea el St. Andrew cuenta con un programa de Convivencia Escolar que involucra a toda la comunidad, sustentado en el principio de reflexión personal, en el asumir los errores, empatizar con el otro y potenciar las conductas reparatorias en todos los miembros de la comunidad.
El deporte también forma parte sustantiva en el desarrollo armónico y valórico de nuestros estudiantes. Es por ello que hemos desarrollados programas que incluyen la práctica , principalmente, del rugby y hockey como selecciones del colegio pues son estas disciplinas quienes por su carácter colectivo potencian nuestro PEI. Estas disciplinas se imparten desde 1° básico hasta IV Medio. Cabe mencionar que el colegio también imparte otros deportes a fin que los alumnos puedan practicar aquellos con los cuales tiene más afinidad.
Con el convencimiento que el Colegio existe para colaborar a los papás en la formación de sus hijos, en el Colegio St. Andrew se procura el desarrollo en forma integral cuidando no sólo el aspecto académico, sino también los aspectos espirituales, morales, artísticos, deportivos, afectivos y sociales, entregando las facilidades para que cada uno de sus alumnos desarrolle sus propios intereses y aptitudes en un ambiente de servicio y respeto hacia los demás. Se trabaja para que el alumno tenga plena conciencia de que el bienestar y progreso de una comunidad es producto del esfuerzo positivo y desinteresado de cada uno de sus integrantes, de esta manera aspiramos que en el Colegio todo el personal docente, administrativo y de servicio, esté involucrado responsablemente en la creación y mantenimiento de un clima valórico positivo para los alumnos y la comunidad en general.
En base a lo anterior, hemos definido los siguientes principios que sustentan nuestro Proyecto Educativo.
- Buscamos desarrollar personas que amen a Dios con sentido de trascendencia.
- Creemos que la excelencia académica es un desafío permanente para nuestros alumnos, lo cual les ayudará a reconocer sus talentos, desarrollar sus destrezas y habilidades cognitivas, logrando así una formación crítica, integral y constructiva frente a la sociedad.
- Consideramos al educador como el principal gestor del aprendizaje del alumno, a través de la reflexión personal y perfeccionamiento constantes.
- Imprimimos a través de los aprendizajes la internalización de la autonomía y la perseverancia para desarrollar alumnos con responsabilidad, sencillez y veracidad.
- Potenciamos la integración personal de nuestros alumnos, motivándolos a cultivar el respeto y la solidaridad a nivel familiar y social.
- Aplicamos metodologías creativas e innovadoras en la enseñanza de los idiomas, en forma oral y escrita, para desarrollar alumnos con un pensamiento global y reflexivo.
- Promovemos el desarrollo de la iniciativa personal, del trabajo en equipo y del espíritu emprendedor para reconocer la importancia del trabajo como forma de contribuir al bien común.
El Colegio St. Andrew se basa en una educación centrada en la persona, donde él/la alumno/a es el sujeto que aprende de manera activa buscando perfeccionarse constantemente y así lograr la trascendencia.
En este sentido, la educación que se imparte en el colegio pretende crear una atmósfera en donde el educando participe activamente en el desarrollo de sus propias potencialidades en un ambiente de sana convivencia social. Se concretará a través de:
- Ambiente educativo y relaciones que favorezcan la responsabilidad, el respeto y la veracidad.
- Actividades recreativas e intelectuales que desarrollan la creatividad y participación del educando.
- Disponer los medios para que los alumnos aprendan de manera autónoma y trabajando en equipo. Se trabaja el autoconocimiento y la capacidad de autoevaluación.
- Libertad a cada ciclo para realizar actividades conducentes a desarrollar las diferentes áreas de la personalidad según el alumno.
El St. Andrew considera al alumno como una persona integral que desarrolla todas sus potencialidades a través de un proceso de formación continuo, así mismo lo considera como una persona con valores y virtudes que le permitan construir una sana convivencia con sentido de trascendencia.
Desde esta perspectiva, los alumnos del St. Andrew podrán desarrollar su proceso de formación e instrucción a través de modelos que le permitan descubrir, conocer y alcanzar su proyecto de vida en un ambiente de trabajo, colaboración y respeto hacia el mundo que los rodea. En lo concreto los alumnos:
- Son considerados únicos e irrepetibles a imagen y semejanza de Dios.
- Reciben un tratamiento personal.
- Son incentivados a la libertad de expresión, la autonomía en el trabajo y la responsabilidad en el actuar.
- Desarrollan sus habilidades y talentos en un ambiente de sana convivencia y respeto mutuo.
- Son considerados hijos de Dios y en este sentido, su formación cristiana se fortalece a través de prácticas que le permiten aprehender y vincularse en forma armónica en su relación con Dios y sus semejantes.
El St. Andrew considera al educador como una persona valórica, íntegra, capaz de desarrollarse y perfeccionarse constantemente.
Bajo este supuesto, los educadores del St. Andrew son el principal gestor del aprendizaje del alumno en el colegio, a través de la reflexión personal y autoperfeccionamiento. En la práctica los educadores:
- Poseen la capacidad técnica para guiar a los alumnos en los logros académicos.
- Poseen un desarrollo formativo evidente que les permite desarrollar su vocación de manera comprometida y en vinculación con sus alumnos.
- Cuentan con el apoyo del Colegio para desarrollar en libertad sus prácticas pedagógicas con creatividad, respeto y solidaridad.
- El educador del Colegio se perfecciona constantemente en pos de entregar una instrucción vinculada a las tendencias contemporáneas de nuestros alumnos.
El St. Andrew cree en el desarrollo de una sociedad solidaria y justa, en la cual el hombre pueda actuar bajo el prisma de los valores cristianos como principal filosofía de vida, relacionándose con sus pares a través de una convivencia basada en el amor, el esfuerzo, la caridad y la honestidad.
Para ellos, el St. Andrew incentiva a la integración personal a través de una actitud coherente de respeto y solidaridad y con un adecuado dominio del idioma oral y escrito (español, inglés y chino mandarín) que nos permita comunicarnos adecuadamente en una sociedad integral y globalizada. Para ellos:
- El Colegio propicia las actividades que permitan la integración entre comunidades educativas.
- El Colegio se abre a la comunidad a través del intercambio de experiencias significativas para los alumnos en comunicación con las distintas realidades político-geográficas.
- La sociedad es concebida por el Colegio como un sistema en que todos sus integrantes son considerados con igualdad de derechos y condiciones.
- El Colegio permite la interacción de los alumnos con realidades muy diferentes para lo cual ha desarrollado un programa de viaje de estudio que involucre el desarrollo, social, académico y cultural.
- El Colegio propicia, incentiva y adhiere a un programa de Formación que implique relacionarse con distintas realidades que nos permita el crecimiento personal.
Los padres de familia son los primeros y principales responsables de la educación de sus hijos. En este sentido, si bien el Colegio es un aporte muy significativo a la irrenunciable tarea de los padres, no puede reemplazarla.
El Colegio permanece abierto a las familias, ve su preocupación y colaboración como un factor positivo que favorece el proceso educativo y la convergencia de criterios en la educación.
El ambiente de respeto y diálogo, de búsqueda común y de libertad, animada por la caridad, salvaguardando las facultades del Colegio y sus profesores, forma parte del proceso educativo.
Dadas las características del mundo de hoy, se hace más indispensable, la mutua complementariedad y la convergencia de los esfuerzos que la familia y el colegio deben realizar.
La familia miembro de la Comunidad Andresina es una familia activa, participativa y colaborativa en el proceso de aprendizaje de sus hijos.
Mensaje del Rector
“Nuestra misión educativa está sustentada en la formación integral de la persona, desarrollando su capacidad y voluntad para autorregular su conducta, con responsabilidad, respeto y veracidad a través de una actitud de vida cristiana y con competencias que le permitan insertarse adecuadamente en la sociedad, aportando lo mejor de sí mismos y poniendo sus talentos al servicio de los demás.”
